DIARIO Online

Domingo


¿Qué clase de tierra ha sido?

Y les habló muchas cosas por parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar.
 Y mientras sembraba, parte de la semilla cayó junto al camino; y vinieron las aves y la comieron.
Parte cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó pronto, porque no tenía profundidad de tierra; pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó.
Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron. 
Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno.
El que tiene oídos para oír, oiga.

En esta parábola es demostrado que todo depende de cada uno. Si uno quiere crecer, prosperar, multiplicar, etc. es uno mismo quien tiene que ser la buena tierra.

La semilla que cayó en pedregales, representa a la clase de persona que quizás quiere recibir todo, pero porque no tiene raíz en sí misma se seca.

Aquella que fue ahogada por los espinos, simboliza a aquellos que cuando los problemas crecen, la fe de ellos va muriendo.

Si alguien no crece con la Palabra es porque está siendo una de las tierras que no dio fruto, porque todos vamos a pasar por eso. Todos vamos a tener un sol para quemarnos, todos vamos a tener espinos para pincharnos, pero aquellos que buscan y tienen a Dios en sus vidas no se van a ver afectados, porque Él va a ser su armadura para protegerlos.

Pero, así como hubo tierras que no dieron fruto, también hubo una buena tierra que al escuchar la Palabra de Dios, obedeció y por eso, fue multiplicada, creció en todo lo que hizo.

Cada uno de nosotros es quien decide qué clase de tierra va a ser a partir de ahora.

Si quiere aprender a ser la buena tierra para que su vida avance y dé frutos buenos, lo invitamos a participar este domingo a las 9:30 hs en calle Rioja 1448, Ciudad.

Domingo


¿Usted está con Dios?

Todos los que creen en Él van a responder con convicción que sí. Aunque los motivos que los llevan a creer eso son insuficientes para que eso sea un hecho. El propio Dios a través de Su Palabra demuestra que no es así: “Dios estará con vosotros si vosotros estuviereis con Él; y si le buscareis, será hallado de vosotros; mas si le dejareis, Él también os dejará”. Dios es misericordioso y fiel pero Él quiere de nuestra parte un compromiso, por esa razón, Él establece una condición para estar con nosotros y bendecirnos. Sin saberlo, muchos se sienten solos y abandonados pensando que Él no los escucha, pero es consecuencia de que ellos Lo dejaron primero. 

Debido a la misericordia de Dios, Él nos alienta: “pero cuando en su tribulación se convirtieron a Dios, y le buscaron, Él fue hallado de ellos”. Esa es la única manera de cambiar de vida: cambiando de rumbo, es decir, convirtiéndose a Él, buscándolo, escuchándolo, obedeciéndole, solo así una transformación será posible en la vida de aquellos que están atribulados.

Para aquellos que Lo buscan con toda su voluntad, y con todas sus fuerzas, Dios les promete paz por todas partes y ser hallado por ellos. Como la Propuesta de Dios ya la tiene, solo queda la invitación para que sea dueño de esa promesa. Participe este domingo a las 9:30 hs en Rioja 1448, Ciudad, para que pueda estar con Él.